viernes, agosto 08, 2008

El futuro es descargable

El siguiente tema ya se ha tratado en muchas ocasiones pero no está de más recordarlo un poco.

El otro día leía que en este último año las microtransacciones a través del Bazar de Xbox Live han alcanzado los 180 millones de dólares. Teniendo en cuenta que desde su lanzamiento (hará 3 años) han acumulado 240 millones de dólares significa que en estos últimos 12 meses la gente se ha volcado por completo en los títulos de XBLA, en el contenido adicional para juegos retail y supongo que en el alquiler de pelis (en USA).

Sony por su parte no solo nos ofrece microtransacciones sino que apuesta directamente por descargas digitales de juegos retail como GT5: Prologue o Warhawk (que posteriormente tuvo una pequeña tirada en soporte físico acompañado de micro Bluetooth), así como Siren, primer título que nos ofrecen por entregas y que al cabo de un tiempo veremos recopilado en formato Blu-ray.

Por último, Nintendo juega en otra liga como de costumbre y se ha subido un poco tarde al carro con WiiWare aunque ya venía haciéndose de oro reflotando su biblioteca de ROMs a través de la Consola Virtual.

Shane Kim comentó hace tiempo que un futuro centrado en la distribución digital no era descabellado y viendo el éxito de Steam y la creciente importancia de la Store y del Bazar me pregunto que sucederá en la próxima generación. Es cierto que la gente es reticente a la pérdida de lo tangible pero lo mismo decían de la música y ahí está iTunes y sus tarjetas prepago, mientras que el cine ya se encuentra en el mismo camino. Resulta inevitable que los videojuegos serán los próximos en hacer la transición.

¿Y la falta de espacio? Actualmente sería impensable bajarse un título como MGS4 pero existen varias soluciones como la mencionada descarga por episodios (nueva fase cada X tiempo), que a su vez pueden resultar una bendición para los desarrolladores. O imaginad un juego deportivo que siempre estuviera actualizado en todos sus aspectos, sin necesidad de sacar una nueva entrega cada año, simplemente pagando una suscripción mensual/anual. La otra opción es buscar dispositivos de almacenamiento masivos como Nintendo y los hologramas.

Sea lo que sea, las compañías anhelan poner fin al arcaico sistema de distribución actual, eliminando los parásitos de la distribución y tomando por completo las riendas de su producto, directamente de su servidor a tu hogar. ¿Y los comercios? Adaptarse o morir, simplemente.

Tal vez no suceda en la próxima generación pero no faltará mucho más. Nuestro tiempo como coleccionistas está llegando, lamentablemente, a su fin.