REC
Nunca me han gustado las películas de "terror" made in Spain, a excepción de Los Otros (únicamente Amenabar podía marcar la diferencia). Recientes estrenos publicitados a bombo y platillo como El Orfanato me han resultado tan soporíferos que me he dormido viéndolos.
Jaume Balagueró marcó un punto de inflexión con Darkness, reconozco que tenía estilo y contaba con algunas escenas memorables, pero en conjunto dejaba bastante que desear, y en cuanto a Frágiles, mejor me ahorro los comentarios. Ahora llega REC, respaldada por el éxito de crítica en Sitges y prometiendo convertirse en un nuevo referente; el resultado es algo así como una mezcla entre The Blair Witch Project y Resident Evil 4 (el juego).
"Graba todo lo que veas", incluso si corres escaleras arriba mientras tu vida está en juego. La mayoría de escenas de REC no tienen sentido alguno, nadie en su sano juicio estaría cámara en mano grabando todo lo que ocurre en vez de luchar por sobrevivir. El único uso correcto e inteligente de la cámara es al final de la película, el resto es un engaño para meternos de lleno en la acción y vivir los escalofriantes acontecimientos del film en primera persona. Y el resultado es realmente efectivo, en parte gracias al magnífico montaje, incluyendo cortes inesperados, saltos de escenas, rebobinados, distorsión de audio, etc. REC como ejercicio de estilo resulta inmejorable, pero como película deja bastante que desear, pareciendo más bien una atracción de parque temático o un survival horror sin argumento alguno (léase RE4). Se abusa de los "sustos" fáciles, encadenándolos uno tras otro, sin respiro, perdiendo por completo la tensión inicial.
REC es entretenimiento puro, si pudieramos conectarle un pad estaríamos ante un magnífico videojuego. Aquellos que busquen un complejo film de terror psicológico que la eviten a toda costa. Amantes de los videojuegos, no se la pierdan.